Problemas fetichistas #17: Una cola de desventuras
de
Noticias Recon
02 septiembre 2019
Una historia de desventuras fetichistas del usuario de Recon T1gerdude
Iba a haber una gran fiesta fetichista y hacía una semana que no me había corrido porque había llegado muy cansado del trabajo. Entonces, cuando llegó la gran noche, estaba super cachondo. Lo único que quería hacer era emborracharme y tomar todas las decisiones incorrectas. Lo que pasa es que no bebo a menudo por lo que no conozco mis límites o cómo controlarlo. Empecé con un par de copas en casa para ponerme a tono. Me puse un look de pup de rubber muy atrevido, pero era como si me faltase algo; la cola. El problema es que, todas las colas que tenía eran con un plug anal incorporado. Fue una mala idea, pero me daba un poco igual ya, puse lubricante sobre el plug y me lo metí por el culo antes de ir a la fiesta.
Llegué a la fiesta y era la caña. Tuve un subidón, me lo estaba pasando genial, me puse a ligar con varios tíos y a la vez sentía un buen masaje en la próstata con el plug. Después de un par de horas, se me empezó a pasar el subidón por lo que fui a pillar una copa a la barra. Me la tomé y volví a la acción, pero no era como antes. ¿Y si me tomo otra copa? Después de la segunda copa, volví a tener un subidón y me lo volví a pasar genial bailando, liándome con tíos y tocándoles. Luego, de repente el alcohol se me sube de golpe. Me di cuenta de que estaba super pedo, pero me lo estaba pasando guay, o sea, seguí de fiesta a pesar de estar hecho polvo. Les pedí a varios tíos que me llevasen al baño y que me convirtiesen en su zorra. Quería tener un montón de pollas en mis manos, en la boca, en el culo; básicamente dentro y sobre mí. Me saqué y me metí el plug varias veces en el culo para que los chicos viesen que estaba dilatado y con bien de lubricante, listo para lo que fuese, pero se me veía que estaba muy pasado, o sea que no hice nada.
Después uno de los organizadores me preguntó si quería ponerme a bailar en el escenario. Como estaba borracho, pensé que sería una gran idea o sea que empecé a bailar como un loco. Me puse a hacer vogue y a perrear como si no hubiese un mañana. Pensaba que era lo más y me puse en cuclillas y a caminar así. Gran error. Después de tres horas con un plug metido, tenía el culo muy dilatado. Al bajar, el plug se me salió del culo disparado. Botó por el escenario y acabó cayendo entre la gente. Me quedé como un tío al que le acaba de caer del culo una prótesis de silicona de 90 euros en la pista de baile. Cayó al lado de los pies de una chica, de un salto bajé y lo recogí del suelo mientras me disculpé varias veces. Me preocupé porque le acababa de golpear un plug con una cola de perro lleno de lubricante y caliente. Uno de mis amigos me dijo luego que había visto cómo le daba en el hombro, pero por suerte, se lo tomó bien y se partía de risa. Muerto de vergüenza, me fui al baño y me lo puse rápidamente antes de volver a la fiesta.
En ese momento, me estaba empezando a entrar sueño y mi noche de borrachera por fin se iba a acabar. Bebí un montón de agua antes de irme con un amigo. Desafortunadamente, mis desventuras no habían terminado aún. Después de recoger mi bolsa en el ropero, no encontraba el móvil. Le di la vuelta a todas las cosas que tenía en la bolsa y al final lo encontré, pero se me olvidó meter el plug en la bolsa otra vez. Lo debí haber dejado en una mesa o en el suelo, pero me di cuenta cuando llegué a casa. Pregunté luego al personal si alguien lo había visto pero no apareció. Supongo que lo tiraron a la basura o alguien se lo quedó para disfrutar con él.
Descansa en paz, cola de la vergüenza. Me diste una noche que nunca olvidaré.
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