Meos – La oportunidad dorada
de
Noticias Recon
30 septiembre 2020
Por Derrick Otter Starr
Con el paso de los años, he explorado bastantes morbos y fetichismos y he llegado a la conclusión de que los meos es mi fetichismo favorito. Los meos o lluvia dorada como lo llaman algunos, es uno de los morbos más versátiles. Hay diferentes formas de explorar este morbo, y como es tan versátil, es normal que tenga un gran interés en este rollo tanto la comunidad fetichista como la sociedad general que realiza prácticas sexuales convencionales.
Los meos es un fetichismo en el que no es difícil meterse, la verdad. Como hay tantas opciones diferentes para explorarlo, se puede elegir el ritmo adecuado para empezar según los participantes. Mearle a alguien cuando estáis los dos en la ducha es una forma de empezar muy común. El chorro del meo caliente con el chorro de la ducha, hace que pase casi desapercibido y no cuesta nada limpiar después. También está la opción de mearle a alguien fuera de la ducha, a esto puede que te cueste acostumbrarte un poco más. El rollo de los meos requiere entrar en un cierto estado mental no solo para el sumiso, sino también para el Amo. Dejar que alguien te mee, lo cual implica un cierto nivel de comportamiento deshumanizador, no es algo que se haga así como así.
Los meos es un fetichismo muy versátil. Se puede combinar con otros fetichismos y añadirlo a una sesión. Puedes atar a alguien y mearle. Puedes mear en un bol para perros y dejar que el puppy humano lo beba. Puedes dejarle al sumiso suplicar y gemir mientras que te venera pidiéndote que le mees. Si te quieres lanzar, cuando estás en un evento fetichista o de cuero o y no te apetece ir a buscar dónde están los servicios, el hecho de tener un urinario humano puede ser útil. Los meos es un fetichismo que se puede considerar como un regalo. Permitir que alguien beba tu meo o que alguien confíe en ti tanto como para dejarle que te mee por dentro o por fuera de tu cuerpo puede ser muy especial y, en muchos casos, el intercambio aleatorio de fluidos es una práctica muy excitante en sí misma.
El beber meos ya sea directamente desde la polla de un tío, o en un vaso, es algo que lo mejor es dejarlo a la elección del sumiso, ya que puede que tenga alguna preferencia sobre cómo bebérselo. Beber de una vaso o de un bol puede parecerle algo difícil a algunos ya que no les gusta ver el pis en sí, por lo que beberlo directamente de la polla puede que sea su especialidad. A otros, como a mi antiguo sumiso, les gustan beber el pis que les dejo y les pone enseñarme los vídeos de ellos bebiéndoselo luego – que por supuesto es un morbo también. Otra forma de disfrutar de los meos, y la verdad es que es una de mis favoritas, es mear dentro de alguien mientras te lo estás follando. Es un morbo que descubrí mientras estaba follándome a un tío y me entraron ganas de mear. Como no me gusta interrumpir una buena follada, decidí usar su ojete como mi orinal personal. La idea de dejarle dentro a un tío no solo tu lefa sino también tus meos, hace que haya una conexión aún más estrecha entre el sumiso y el Amo.
Como he dicho antes, el rollo de los meos tiene su propio espacio mental. Recibirlo o darlo no es siempre fácil y tener vergüenza de ponerte a mear es algo que les pasa a algunos y hay que hacer un esfuerzo para superarlo y acabar meando. Beber los meos de otro tío es lo mismo. Tu primera experiencia puede que no sea genial, a menudo el sabor puede desempeñar un papel importante en lo que se refiere a disfrutar de este rollo – si es demasiado fuerte, el sumiso puede que no sea capaz de aguantarlo.
El espacio mental en el que me metí la primera vez que probé los meos no fue el mejor. Probé el pis directamente de la polla de un tío mientras estaba borracho y la cosa no salió muy bien. El espacio mental, o en esa ocasión, la ausencia del espacio mental fue un fallo completo. Era joven (creo que tenía 27 años) y yo tenía ganas de complacerle al tío en cuestión. El hecho de estar demasiado bebido mientras te montas el rollo meos puede acabar saliendo mal, como me pasó a mí. Acabé vomitando en la bañera y básicamente no pude hacer nada más el resto de esa noche. Hasta el evento de cuero CLAW no tuve una experiencia mejor con los meos. Conocía al tío mucho mejor y su pis tenía un sabor más cercano al sabor del agua. El pis que es casi agua es lo más recomendable cuando se empieza en esto. Cuando encontré mi preferencia en lo que se refiere al sabor y después de dos años de experiencia, estaba más que preparado cuando recibí una invitación a una piss party privada en el IML de 2015, que fue la primera vez que iba al IML. El amigo de un amigo conocía mi interés y me invitó. Era una habitación sin muebles y con sábanas de plástico extendidas por todo el suelo. Nos dijeron que nos desnudásemos y que nos pusiésemos un brazalete amarillo en la muñeca izquierda o derecha. Izquierda para los activos y derecha para los sumisos que querían que les measen. Como soy sumiso, me puse el mío en la muñeca derecha y me fui al centro. Esa noche encontré mi lado dominante en el mundo de los meos al dar todo el pis que me bebí, a otros sumisos – dentro de ellos o por encima, de todas las formas imaginables.
Hablar las cosas puede ser muy útil, quizás el sumiso puede beber más agua para compensar con el sabor y el olor. Beber pis por la mañana, cuando puede tener un sabor y un olor más fuerte no es la mejor opción (a menos que ese sea el sabor que te guste). Sin embargo, hay sumisos experimentados capaces de beber pis de café, de cerveza a saco. Realmente todo depende de tus preferencias.
Cuando disfrutamos de nuestros fetichismos, puede ser importante decirle al otro que también lo que te gusta. Dejar claro lo que te pone puede ser útil. Ya sea con un pañuelo, con tu look, o con tus prendas de cuero con detalles en amarillo para empezar la conversación. No se debe suponer que simplemente porque alguien lleve ese color, ese rollo es el que le pone. El amarillo puede que sea el color favorito de ese tío en cuestión, por lo que no va a pasar nada por hacerle las preguntas correctas. Como con cualquier otro fetichismo, la conversación y el consentimiento son muy importantes. Asegurarte de que a todos los participantes del intercambio de meos les pone y están de acuerdo también es una parte muy importante cuando el objetivo principal es disfrutar del néctar dorado.
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