LAS EXPERIENCIAS DE NUESTROS USUARIOS: Castidad, por Steveloveskink
de
Noticias Recon
30 enero 2018
Nuestro usuario Steveloveskink se ha convertido a la castidad. Nos cuenta su historia aquí, y además nos da un par de consejos para todos los que tengan curiosidad por saber cómo pueden empezar.
Cuando te paras a pensarlo, tener tu polla rodeada de acero, sin acceso a ella, es bastante extraño. No es algo que mucha gente haría. También te pone super cachondo, que es la razón por la que me he visto a menudo en esa situación.
Soy sumiso, y como tal, me encanta la tensión entre el control que tengo yo y el control que otro tenga sobre mí, así que lo flipo con los artilugios que te hagan sentir que estás encerrado. Pero con esos artilugios hecho en plan estándar, acabo teniendo picazón, roces y una incomodidad peor que la de un cachorro antes de que le castren en la clínica, al final siempre tengo algún problemilla después de llevarlo puesto cuatro o cinco días, así que me medí la polla y tiré la casa por la ventana y me compré un aparato personalizado de Steelworxx. Tres meses después me convertí en el orgulloso propietario de un aparato de castidad de metal hecho a medida.
El aparato que tengo cuenta con una sonda incorporada, yo estaba nervioso por saber cómo funcionaría después de varios días. Pero como tenía ganas de llevármelo puesto para ir a dar una vuelta con mi nuevo juguete, acordé con un amigo mío que es Amo que me lo pondría y me retó a llevarlo puesto hasta que nos viésemos en Folsom un mes más tarde. Me quedaba como un guante, y la sensación al tener el acero dentro y alrededor de mi polla era un mensaje claro de que no podía tocarla.
Aunque suene así de bien, lleva tiempo acostumbrarse. El bulto extra bajo mi ropa, la incomodidad por la noche cuando tienes erecciones, tener que sentarte para mear siempre (los urinarios de pie dejaron de existir para mí) y el hecho de que no podía toquetearme siempre que quisiese fueron algunos de los ajustes que tuve que aceptar.
Pero el sentimiento de estar encerrado todo el tiempo, y eso es la parte extraña, me daba un poder interior extra. No hay medias tintas con la castidad. No estás encerrado a medias. Tienes que aceptarlo y llevarlo con orgullo, y eso te da poder. Aunque estaba dándole a otro control sobre una parte fundamental de mi propio cuerpo, me hacía sentir muy bien.
El período de tiempo más largo que lo he llevado puesto ha sido 47 días, después al final me dieron un orgasmo de campeonato como "recompensa" (gracias). Después de estar liberado un par de semanas, tengo la sensación de que es el momento de volver a estar encerrado, y por casualidad, me acaban de dar una nueva meta: encerrado 70 días.
Lo gracioso es que tengo las llaves en casa. Lo puedo abrir cuando quiera. Pero me he comprometido con alguien a hacerlo seriamente, y me encanta la auto-disciplina que tengo. Hay veces en que en una de las fiestas organizadas a través de Recon o Grindr tengo tantas ganas de correrme que parece que voy a explotar. "Me puedo liberar solo para esta fiesta y luego puedo volver a estar encerrado, no pasa nada por un orgasmo", es lo que me digo a mí mismo, intentando convercerme. Pero nunca me convenzo, y siempre me lo he pasado tan bien como los demás (o quizás mejor) estando con otros tíos cuando estaba encerrado en castidad.
Ha llegado a un punto en el que aunque esté liberado, no necesito masturbarme como lo hacía antes (las acciones de la compañía Kleenex han caído en picado). No necesito correrme para ser un hombre, un sumiso, para ser un hijo de puta vicioso. En lo que a mí respecta, el foco al ponerme a jugar no está en tener un orgasmo, se trata de estar 'suelto' y dajr la cosa fluir.
Y así es como la castidad puede ser liberadora.
Algunos me han preguntado sobre los momentos en que estoy encerrado y sobre cómo pueden explorar ellos la castidad, y en ese campo puedo ofrecer un par de consejos fáciles:
1. Encuentra el aparato adecuado para ti. Todos temenos diferentes proporciones, no esperes estar encerrado 7 días a la semana con el primer aparato que te pruebes. La castidad puede ser muy frustrante, pero no debería ser algo incómodo o no saludable.
2. Pon unas reglas básicas. Es tu cuerpo y tienes que decidir las reglas de tu castidad independientemente de si te encierras tú a ti mismo o si te encierra otra persona. Me libero cada 4 o 5 días para limpiarme en profundidad, por ejemplo, la higiene tiene que ser parte de tu rutina. También es una buena idea tener una llave de emergencia a mano, por si acaso tienes una buena razón para liberarte. Y no, estar cachondo no es una buena razón.
3. Déjate llevar. La castidad te exige que te olvides del control que normalmente tienes. Déjate llevar. Llévalo con orgullo. Déjalo fluir. Sí, a veces es muy frustrante, pero la tensión y el control es raro y delicioso.
La castidad no es algo indicado para todo el mundo, pero si te apetece explorar el maravilloso mundo del morbo y el fetichismo entonces, te la recomendaría encarecidamente. Lo que puedes encontrar te sorprenderá.
La castidad es una nueva categoría entre los intereses que tenenos en Recon, y puedes encontrar un montón de aparatos de castidad en Tienda Recon.
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