EXPERIENCIAS DE NUESTROS USUARIOS: Inmersión en el cuero y en el Leather Social
de
Noticias Recon
09 mayo 2020
Por OhBilly, del Equipo Recon
Cuando era más joven y pensaba en la palabra 'fetichismo', mi mente iba directamente al cuero. Hombres vestidos de cuero de pies a cabeza. Aviadores. Una habitación oscura, siniestra. Luz roja. Ambiente cargado. Todo esto es lo que esa palabra traía a mi mente. La verdad es que creo que esa imagen viene de las escenas de bares gays de Loca Academia de Policía o de Cruising, pero lo que puedo decir es que no era yo muy espabilado en estos temas y no tenía mucha idea de lo que era realmente el mundo del cuero.
Recuerdo ver las imágenes de Tom of Finland por primera vez en una revista cuando era un adolescente; la tira en la que Kake sube por una ventana, se folla a un tío, y después le folla el padre del tío al que se ha tirado. Está claro que me hice un montón de pajas viendo esas imágenes. No era solo la anatomía exagerada y lo explícitos que eran los dibujos lo que me ponía cachondo, era la forma en la que este hombre entraba en esa casa y hacía lo que le daba la gana. En mi cabeza, el cuero tenía un olor penetrante a sexo y a pecado. Me hacía sentir que debía tener cuidado y me excitaba a la vez. No sabía si el cuero estaba hecho para mí, pero lo que estaba claro es que despertó mi interés.
Cuando empecé a tener más curiosidad y a hacerme más mayor, y empecé a dar mis primeros pasos en el mundo del fetichismo, lo primero en lo que empecé a experimentar fue el rollo cuero. Un tío me puso un arnés una vez, y me gustó la sensación, así que me acabé comprando uno. Me encantaba, pero después de esto, la evolución de mi colección de cuero se quedó un poco estancada. Me pillé una cazadora, unos pantalones cortos, unos pantalones largos y un delantal, todo de cuero. Todas las prendas estaban bien (excepto los pantalones largos que eran feos y me quedaban bastante mal), pero las diferentes prendas no combinaban unas con otras. La ropa de cuero es cara, y mi situación económica no me permitía comprarme un look completo de cuero, así que me metí en otros rollos como el rubber y el rollo zapas.
Creo que la mayor parte de la gente piensa que el precio de la ropa de cuero es un obstáculo. Por ejemplo, en el Reino Unido el 69% de los chicos que han seleccionado el cuero como uno de sus intereses principales tienen 35 años o más. Evidentemente habrá gente joven que quizá tiene más dinero, y gente más mayor que puede que tenga menos (…yo tengo 35 años), pero lo más normal es que cuanto más mayor eres, tu situación económica vaya mejorando, lo que te permite gastar más dinero para comprarte más prendas y más looks.
Aunque he ido a eventos de rollo cuero con el curro en el pasado – sobre todo al BLF Easter – siempre me he sentido un poco como un impostor, merodeando por ahí en mis pantalones de cuero, que me quedan mal y son bastante feos. No creo que ayude el hecho de que en esos eventos hay un montón de tíos con looks alucinantes de pies a cabeza, muy potentes, y que me hacían sentir un par de niveles por debajo de los estándares del código de ropa de esos eventos. Sin embargo tengo que destacar que esas ideas procedían de mi cabeza y solo de mi cabeza, ya que todos los tíos que he conocido en los eventos de cuero siempre han ido muy simpáticos. Estaba todo en mi cabeza básicamente, y no en las suyas.
Como tenía poca experiencia en el mundo del cuero – sobre todo en mi ciudad, Londres – decidí que era hora de empezar a explorar este ambiente en condiciones. En noviembre conocí al usuario de Recon BLKaiser, que nos habló del The Leather Social en Comptons, Soho. Él ahora ayuda a organizar este encuentro social. Simon, el creador del Social (ximeno en Recon), quería concebir y dar el pistoletazo de salida a un evento para la comunidad del cuero inspirado en la cultura de los bares de Berlín. Querían tener una atmósfera relajada en plan domingo por la tarde, muy acogedora y abierta a todos y que reuniese a todos los tíos a los que les pone el cuero. Este plan parecía una buena opción para mi plan de seguir introduciéndome y conociendo más este mundo.
Esa tarde me puse mis mejores galas (cazadora, cinturón, botas, vaqueros) y me fui a Soho. Al llegar a Comptons y al ir a la planta superior, me di cuenta de que no había ninguna razón para los nervios que tenía. Fieles al propio carácter sociable del evento y en una ambiente que acogía a todo el mundo, cuando llegué me encontré con tíos que tenían varios looks de cuero diferentes, algunos de pies a cabeza, otros solo una cazadora y había algunos que hasta no tenían puesto nada de cuero. El espacio estaba lleno de fans del cuero, eso sí y había una atmósfera agradable que te hacía sentir relajado y cómodo.
BLKaiser vino a verme y estuvimos hablando un rato sobre el evento Leather Social y el ambiente en general. "Creo que a algunos chicos el mundo del cuero les asusta y les intimida, piensan que está lleno de hombres en plan duro, que van a saco y son grandotes" es lo que me dijo cuando le hice un par de preguntas sobre cómo se podía conseguir que viniesen tíos nuevos a este ambiente "A menudo, los novatos no tienen su propio cuero y les cuesta integrarse sin él – Bueno, esto no es totalmente cierto." Le pregunté qué es lo que él pensaba que podían hacer los chicos que tienen esa opinión, y me dijo "Pueden comprar prendas de segunda mano – ¡yo, personalmente lo hago! Puedes ir a Camden y echar un vistazo y ver qué hay en las tiendas de cuero. Te puedes probar un par de cosas que te gusten – lo más importante es cómo te quede no el precio". También destacó que el Leather Social tiene su propia sección con prendas de segunda mano. La idea es que la gente traiga sus prendas viejas para cambiarlas o venderlas. Esto es un buen punto de partida para los novatos que están empezando en este mundo, creo yo. No solo puedes pillar algunos looks chulos, sino que también puedes conocer a algunos de los chicos que ya están metidos en este mundo.
"El objetivo principal del The Leather Social – de acuerdo con los planes y las aspiraciones de Simon – es crear un espacio donde los tíos a los que les gusta el cuero puedan conocerse y hablar los unos con los otros en un contexto social". Me dijo que "En el fondo, esto crea lazos que fortalecen nuestra comunidad." Además, añadió "El otro objetivo es crear un espacio seguro en el que los novatos que quieran meterse en el rollo del cuero, como por ejemplo tú mismo, puedan venir, conocerse e interactuar con otros tíos más experimentados para que puedan desarrollar sus propios intereses."
Me tomé los últimos comentarios de BLKaiser muy a pecho y empecé a hablar con algunos de los chicos que estaban allí. No hubo ningún tipo de actitudes desagradables o que me hiciesen sentir incómodo en todo el evento, y el hecho de que mi look no fuese perfecto tampoco le pareció importar a nadie. El Social estaba lleno de chicos de todo tipo, de todas las partes del mundo, de todas las edades, de todos los tamaños y formas. Lo que teníamos en común era nuestro interés por el cuero. No me sentí como un impostor, ya que dejé de darle vueltas en mi cabeza a las mismas cosas de siempre. Vamos, que disfruté de las vistas, de los sonidos y de los olores – además de las cinco o seis pintas de birra que me tomé.
Me quedé un par de horas, y luego me fui a casa. Era una noche en la que hacía bueno y aunque he aprendido que no es necesario, elegí personalmente quedarme con la cazadora puesta todo el tiempo, por lo que me estuve asando todo el rato (la mala relación con el calor de mis orígenes celtas empezó a resbalar por mi espalda en forma de sudor y formando un charquito en la raja de mi culo). Salí de Comptons con una sensación de felicidad y con la cabeza más alta que de costumbre al caminar a través de todo el gentío de Soho. No era yo exactamente la definición de un leatherman, pero decidí que iba a llevar puestaslas prendas de cuero que tengo con todo el orgullo del mundo.
Cuando me monté en el metro me di cuenta de que lo único que me impide ser lo que quiero ser, soy yo mismo. Sí, es difícil convertirse en un hombre de cuero o un verdadero leatherman sin nada de cuero, pero hay diferentes formas de encontrar caminos alternativos, y siempre tienes chicos como ximeno y BLKaiser, que están ahí para darte un par de buenos consejos, si vas a eventos como el The Leather Social por ejemplo, y si estás abierto a escucharlos. Pienso que aún estoy comenzando mi viaje por el mundo del cuero, pero parece que el camino se ha hecho mucho más accesible, y tengo una curiosidad enorme por explorarlo.
* Este artículo fue publicado originalmente en junio de 2017
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