ARTÍCULO DE USUARIO: El arte de organizar una sesión BDSM
de
Noticias Recon
05 septiembre 2020
Por SilverBack93
Organizar una sesión BDSM de principio a fin con el objetivo de asegurarnos que todo se desarrolla como se ha planeado es un poco como preparar una lista de la compra durante el confinamiento. Si no pones la lista en un papel con todas las cosas, la sesión puede que acabe mal y puede que no te satisfaga y pierdas confianza en el tío con el que te lo estás montando. Pasa lo mismo en el gran mundo del BDSM. Si no te molestas en decidir las prácticas deseadas, para ese plan, puedes cancelar la sesión directamente.
Cuando tenía 18 años y empecé a hacer mis primeras sesiones como sumiso, pensé que ser el dominante era algo más simplista, y que lo único que había que hacer era establecer tus límites para que la sesión saliese bien. ¡No es así! Conforme fui teniendo más experiencia, me di cuenta de que ser el sumiso era tan difícil como ser el Amo. ¿Por qué? Bueno, porque la organización es tan importante para el uno como para el otro. Gracias a la organización de una sesión, nos lo pensamos dos veces antes de aceptar a un nuevo compañero de juegos. También nos ayuda a gestionar nuestros sentimientos durante la realización de prácticas dolorosas. Nos podemos dar cuenta de que abrir la puerta de este gran reino es algo pequeño si lo comparamos con las increíbles aventuras que vienen después. En cuento entramos en este mundo, debemos aprender a discernir qué es lo que representa una sesión perfecta para los dos, empezando con un punto clave y la razón por la que estoy escribiendo este artículo: la organización.
Los comienzos normalmente son difíciles, pero siempre sonrío cuando establezco en mi cabeza el orden de lo que va a pasar en mi sesión BDSM. Tenía 19 años cuando descubrí cuánto me gustaba la dominación física (bondage, tortura con cosquillas, cualquier cosa que tenga que ver con prácticas corporales). El problema es que preparar una sesión con un fetichista que busca el placer requiere más trabajo y esfuerzos que dar un buen apretón de manos como presentación. Es absolutamente necesario pensar y planificar como se va a ir desarrollando la sesión, y desafortunadamente a muchos fetichistas se les olvida hacerlo. Se debe implementar una estrategia para que nuestros compañeros de juegos se sientan como en casa.
Lo primero de todo, me sorprendió el aspecto financiero y de material de las sesiones BDSM. Me he dado cuenta de que cada vez más tíos, ya tengan experiencia o no, piensan que el Amo al menos debe poner las cuerdas, las capuchas y el lubricante para tener una sesión completamente satisfactoria. ¡No soy rico y encontrar todas esas cosas en internet puede ser un poco difícil a veces ya que normalmente son bastante caras! Sin embargo, es importante no desanimarse, ya que nuestro mundo BDSM aún tiene ''puntos de unión'' con el mundo normal. Para una buena sesión de pezones, puedes usar pinzas de la ropa. Si no tienes una capucha, usa una bufanda. También se puede encontrar cuerdas en tiendas "normales"… esta parte primaria de una sesión necesita de una buena organización…así es como podemos distinguir un buen organizador de uno malo. Cuando empecé como Amo, me tomaba las cosas así, y cada mes compraba algo de material BDSM que también era un capricho para mí mismo, por menos de 50 euros cada vez. De esa forma, mis compañeros confiaban en mí más, y me dejaban atarles con más confianza. Date un capricho y sé innovador, pero asegúrate de que no les haces daño a tus compañeros de juegos. Debes actuar como si fueses profesional siempre.
En segundo lugar, está claro que una buena organización no es suficiente si no muestras ningún tipo de amabilidad, ¡o transparencia! Sé honesto, y si eres nuevo en relación a determinados aspectos, no lo intentes esconder. Esto podría arruinar lo que venga después. La comunicación social es una de las prácticas más importantes, viene justo después del aspecto material del BDSM. No deberíamos avergonzarnos de nuestros defectos, y deberíamos poder hablar abiertamente de los temas que queramos. La confianza hay que ganársela, y eso es lo que yo promuevo cuando conozco a algún tío nuevo. Para mí, tener conversaciones con mis compañeros sexuales es muy importante. Como Amos o sumisos, nuestra misión es dedicar nuestras vidas al intercambio comunicativo. Hablemos antes de la sesión, durante la sesión y después de la sesión. Te garantizo que es la clave para que salga bien una sesión.
En tercer lugar, tenemos la reflexión. No sobrevalores tus habilidades para dominar o someter a los otros ya que esto podría suponer un problema. Debes saber bien cómo ser espontáneo y lógico. Después de pasar todo este tiempo conociendo a tíos en el mundo del bondage y la tortura física, me he dado cuenta de que, para organizar una sesión de forma efectiva, es importante dirigir lo que he dicho antes en este artículo, "la comunicación y la equipación", hacia nuestro objetivo principal: llevar al otro al clímax físico o mental. Aunque tengo que admitirlo, eso lleva tiempo. Una sesión BDSM no es un mero polvo (la gente que dice que la sodomía y la felación son prácticas BDSM está muy equivocada). Tenemos que pensar en las diversas posiciones de bondage, las torturas que les vamos a infringir a los sumisos, el lubricante que usaremos, las máscaras, la forma en la que entrenamos a nuestros chicos…
De esta forma, poco a poco y dependiendo de las habilidades que tienes, tus sesiones acabarán siendo perfectas a partir del momento en que tu cerebro evalúe las diferentes fases de este mundo intrigante.
Para finalizar, mantengamos una actitud comunicativa y desempeñemos nuestros papeles bien. Deberíamos también desarrollar proyectos BDSM para el futuro, montárnoslo de forma segura, y sobre todo, no deberíamos poner en peligro nuestras vidas o las vidas de los demás. Creemos sesiones perfectas con nuestros compañeros sexuales. Da igual lo que prefiramos hacer o cuánta experiencia tengamos, deberíamos elaborar nuestras sesiones para asegurarnos de que son seguras y de que nuestros amigos disfrutan tanto como nosotros.
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