ARTÍCULO DE USUARIO: El chico se convierte en el objeto de rubber del Master.
de
Noticias Recon
21 febrero 2022
Por Sirscollaredboi
Los tres chicos estaban de pie con sus collares de perro puestos, con las manos atadas sobre sus cabezas, esperando a sus Masters. Les habían mandado que se limpiasen los unos a los otros, que comprobasen que nos les quedaba ningún pelo en el cuerpo, y después les habían dado órdenes para que se metiesen los unos a los otros cada uno un plug anal.
Cuatro chicos desnudos con ganas. Tenían las pollas enjauladas en dispositivos de castidad. Con arneses en la cabeza, con mordazas en la boca. Inmovilizados de muñecas y tobillos. Sus cabezas rapadas se tocaban entre ellas. Cuatro chicos excitados, nerviosos, retenidos, colgando como las camisas que están colgadas en las perchas.
Objetos. Nada sin sus Masters.
Cuatro chicos a los que les duelen las pelotas, con erecciones frustradas, los intentos de empalmarse se veían ahogados por las barras de las jaulas que los mantenían en castidad. Supercachondos, con muchas ganas. Cada chico tenía su polla enjaulada, sin correrse desde hacía dos semanas. Con una mordaza en la boca. Incapaces de hablar entre ellos. Deseando rozar cada uno su polla con el chico que tenían al lado, sin que con ello fuesen a conseguir nada. Lo que les mantenía cachondos era su camaradería y la piel desnuda y sin pelo del chico que tenía cada uno a su lado. Cada uno de ellos sabe cómo se sienten los demás justo en ese momento. Una hermandad. Una humillación compartida.
Cada uno de los chicos está entrenado según los altos estándares de su propio Master. Entregados, leales, habiendo jurado servir y obedecer a sus Masters. Chicos poseídos, con el collar de perro puesto, controlados. Parece que son pedazos de carne en la nevera de un carnicero. Trozos de carne humana firme y madura. Esperando. Sin saber qué es lo que han planeado sus Masters para ellos durante esa noche.
Uno de esos chicos soy yo.
Como a este chico no le permiten usar pronombres personales, ese chico se referirá a él mismo con la palabra ''chico'', ya que las reglas de Master Mark deben ser obedecidas en todo momento.
Justo en ese momento se están preparando cuatro Masters para salir, poniéndose sus mejores looks para pasar la noche en un club fetichista. Sus chicos se han pasado horas dándole brillo a las botas de sus Masters, y asegurándose de que las prendas de los amos estaban limpias, brillantes y en perfecto estado de presentación. Mientras los Masters se vestían y se preparaban, los chicos esperaban. Pacientemente.
Los chicos podían oír hablar y reírse a sus Masters en la habitación de lado, cada chico ponía especial atención a la voz, las carcajadas y el sonido de los pasos (y de las botas) de su amo. Al final, el Amo de este chico que os escribe hoy fue a por su chico y lo cogió de donde estaba colgando.
"A estirarse, chico, sígueme. Es hora de vestir a mi chico. Master va a sacar por ahí a su chico de rubber esta noche" informo mi Amo.
Master estaba super bueno con su traje de rubber. Brillante, desde la gorra de Muir hasta sus botas de goma. El chico se estremecía, al otro lado de la correa de perro, mientras le conducían al vestidor. La dominación y la autoridad de mi Amo tenían normalmente ese efecto en el chico. El chico oponía poca resistencia al poder de Master Mark. Siempre había sido así. El chico conocía el efecto de ponerse rubber que tenía en el amo del chico, y el chico veía cernirse sobre él una noche difícil usándole a saco.
Master Mark supervisó cómo se ponía su chico el rubber, y le ajustó el traje que le cubría completamente el cuerpo al chico, la capucha y las botas. El chico quedó encerrado dentro de un collar de perro de rubber grande y unos elementos que restringen los movimientos de muñecas y tobillos y que se pueden cerrar con candado. Ahora el chico se había convertido en un objeto, que era una de las facetas del chico y de los usos que hacía de él Master Mark.
Con los manos atados detrás de la espalda del objeto, le mandaron que se arrodillase en una esquina, mientras le metían la mordaza hasta el fondo de la boca. Master y objetó sabían que el objeto se iba a poner a babear en nada.
"¿Ya estás escurriendo, objeto? ", Master me pregunta, riéndose. "Bueno, soy un objeto''. Vamos a tener un aspecto inmejorable esta noche. Sigue así, objeto. Estamos esperando que llegue el Uber".
El objeto intentó balbucear a través de la mordaza. ¿Con un Uber? ¿Master Mark iba a llevar a su objeto así en un Uber? Master Mark debía escuchar el balbuceo del objeto o ver cómo se le ponía el cuerpo tenso al objeto.
"¿Qué pasa objeto? ¿Se pensaba el objeto que íbamos a caminar?" Master se rio a carcajadas. Relájate, objeto, recuerda que debes respirar. Master estará al lado el objeto. Cuidaré de mi objeto." Le dijo Master con confianza.
El objeto no podía hacer nada más que esperar y obedecer, con lo nervioso que estaba. El objeto confiaba en Master Mark y se enfrentaría a este desafío. El objeto había decidido ser fuerte en la sumisión y ser completamente obediente. Cuando oyó el sonido del claxon fuera, Master le dijo al objeto que el Uber había llegado.
"Solo falta una pieza para completar el uniforme del objeto de Master", anuncio Master, mientras le quitaba la mordaza y le ponía una máscara de gas y un tubo de respiración. Mientras le quitaba la mordaza, Master le ordenó al objeto que estuviese callado, "Nada de hablar, objeto, ¿entendido?', el objeto asintió con la cabeza.
El objeto fue conducido hacia el exterior, a través de una correa, con las manos atadas por la espalda, hasta el Uber que estaba esperando fuera. El corazón del objeto latía con fuerza y el sudor le escurría debajo del rubber. Master ayudó al objeto a montarse en el asiento de atrás, le puso el cinturón, comprobó que las muñecas estaban atadas y se sentó después al lado del objeto.
"Aquí vamos, objeto. Relájate, tardamos unos 20 minutos y vamos a disfrutar cada uno de esos minutos" dijo Master con malicia.
El objeto sintió cómo abrían las cremalleras del pecho, y los dedos de Master tocaban los pezones grandes y apetecibles del objeto. El objeto gimió a través de la máscara de gas, mientras Master le pellizcaba los pezones, con fuerza, hasta que acabó poniéndole unas pinzas unidas a través de una cadena. Master tiraba de la cadena, divirtiéndose con el sufrimiento del objeto.
"Esta máscara de gas tiene un tubo de respiración. ¿Se ha dado cuenta el objeto?" preguntó Master.
El objeto asintió con la cabeza, para indicar una respuesta afirmativa.
"Mucho mejor para controlarte la respiración", anuncio Master. "El objeto sabe qué debe hacer. Relájate objeto, exhala y sigue el camino que voy a mostrar".
El objeto había sido entrenado según las técnicas de control de respiración de Master Mark pero se quedó sorprendido porque todo eso iba a tener lugar en un Uber, con el conductor estando presente. El objeto esperaba que fuese un conductor muy fetichista, y que disfrutase de la sesión de sus pasajeros esa noche. Después de varios minutos controlando mi respiración, y una vez que el objeto se sobrepuso a la resistencia inicial del propio objeto, el objeto se relajó y lo encontró reconfortante, con una gran conexión e intimidad con Master Mark, compartiendo el aire que respiraban, y poniendo una confianza total en Master Mark.
El coche se detuvo y el objeto fue sacado del coche a la acera que estaba bien iluminada, de ahí le introdujeron en un local y le hicieron subir dos pisos de escaleras de metal. Master hablo con el portero, antes de llevar al objeto a un pasillo bastante oscuro, para después entar en una sala con un bar. Había varios masters vestidos de rubber y de cuero, y el objeto reconoció a los chicos de la habitación donde le habían tenido almacenado, ahora vestidos de rubber o de cuero, al lado de sus masters.
El objeto estaba atado con el cordel, y estaba al lado de Master Mark, mientras que Master hablaba con la gente, el objeto fue liberado un par de veces para ir a comprar las bebidas para su master. Como el objeto volvía a llevar puesta la mordaza, tuvo que pedir las bebidas gesticulando y señalando lo que quería. Master controló con firmeza a su objeto esa noche. En un par de ocasiones le dio cerveza al objeto, se la pasó directamente master desde su boca a la del objeto. Una forma íntima de compartir. La cerveza sabía mejor así y reforzaba la dependencia del objeto con respecto a Master Mark.
"Es la hora de fumar mi puro, objeto. Master se va a relajar en el sillón de cuero, y mi objeto va a ser mi reposapiés. ¿Entendido, objeto?"
El objeto asintió con la cabeza, entendiendo el mensaje, y se puso en la posición indicada delante del sillón. Sintió el peso de las botas del Master en la espalda del objeto, el objeto se metió en el papel de reposapiés – todos vieron la sumisión del objeto, y el poder y la dominación de Master Mark. El objeto se imaginó la diversión del Master amplificada por el puro, la satisfacción de master, y el placer del master es lo que sobrevolaba en la mente del objeto. A pesar de la propia incomodidad y la humillación del objeto, el confort del Master era lo más importante. Las propias necesidades del objeto eran secundarias, y en orden de importancia venían después del placer del Master.
"Me pregunto si los otros chicos del almacén se lo estarán pasando tan bien como el objeto. Mi objeto va a dormir en la jaula esta noche. No se va a quitar el rubber durante un tiempo", me informó Master. "Te sientes bien, ¿verdad, chico? Esto es un sueño, objeto".
Asentí para mostrar mi acuerdo, el objeto se sentía orgulloso de servir a Master Mark, sabiendo que habían servido de algo todos esos meses de entrenamiento duro y doloroso que el objeto había soportado.
"Buen objeto". El objeto sintió cómo Master Mark le acariciaba la cabeza, la tenía cubierta de rubber.
El objeto no solo asintió mostrando su acuerdo, sino que una ola profunda de sumisión y devoción por Master inundó el cuerpo del objeto. Un sueño hecho realidad. El objeto no cambiaría esto por nada del mundo.
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