ARTÍCULO DE NUESTROS USUARIOS: El viaje heroico de un esclavo
de
Noticias Recon
12 septiembre 2019
Por un usuario anónimo de Recon
Últimamente he estado investigando cómo se estructuran las historias, sobre todo las del tipo ''El viaje del héroe'' que constituye la base de la mayoría de las películas de Hollywood. Piensa en Luke Skywalker en la Guerra de las Galaxias. Y me ha sorprendido que mi propio viaje personal hacia el estado de que me posean ha seguido un camino similar. No es que haya estado destruyendo Estrellas de la Muerte, pero los capítulos que me han llevado a meterme en el mundo del cuero, a que me poseyese mi Amo, son muy similares al viaje de ese héroe. No soy una especie de gran héroe, pero al exponerme y correr algunos riesgos, me han ocurrido cosas extraordinarias. Os explico.
Todo empezó, al igual que con Luke, en el mundo normal. Tenía un montón de prendas fetichistas, que me encantaba ponerme y a veces iba a clubs de vestido de cuero o de rubber. He chateado con muchos tíos geniales de todas las partes del mundo, que he visto en personas pocas veces, pero he pasado bastante tiempo con ellos delante de una webcam. Los juegos que me montaba estaban bien, pero, en lo que a mí respecta, para tener relaciones sexuales siempre tenía que haber algo de ropa fetichista. Además, había una contradicción entre mi aspecto y lo que sentía en mi interior. Llevaba una gorra Muir y pantalones de motero y me confundían con un Amo, pero en mi interior yo sabía que ese no era yo, y aunque me gustaba mi look, mi yo verdadero no residía dentro de él. Quería más. Era el momento de pasar de la webcam, crear mi propia historia y responder a la llamada de la aventura.
La llamada vino de un Amo flipante, que acabó poseyéndome como su esclavo. Nos conocimos por internet y conectamos al instante. Llevábamos chateando un par de años, nos lo montábamos juntos a veces. Sin darme cuenta, había conocido a mi mentor. ¿Os acordáis de Luke en el desierto? Este hombre fue generoso a la hora de compartir su tiempo, me animó a asistir a más eventos, a hablar con un grupo de tíos más amplio, y a probar un montón de cosas nuevas. Rápidamente abandoné mi mundo normal y entré en un nuevo y emocionante mundo (la webcam se rompió y no me compré una nueva). Cada vez que quedábamos, me hacía ir más lejos, más allá de los límites que me había impuesto a mí mismo y empecé a dejarme llevar. Probamos todo un menú de experiencias y descubrimos qué funcionaba y qué no. Lo que yo descubrí es que me encantaban todas las opciones. Estaba progresando. Intercambio de poder, adoración, ataduras, control sensorial, enjaulado, meos, la lista era interminable. Estaba dando todo de mí mismo. Me estaba retando a mí mismo a ir más allá de lo que pensaba que era posible.
Desde luego que me costó al principio y no quería sumergirme completamente. Nuestros juegos eran fuertes, y yo era el sumiso. Me acuerdo del momento exacto en el que esto cambió. Todo cambió, y pasé de unos simples juegos a una realidad finalizada y terminada. Mi Amo me puso su gancho de cadena favorito, tirándome de la nariz hacia arriba, y me ordenó que me mirase en su espejo de cuerpo entero. Mi verdadero yo, mi yo esclavo estaba mirándome. "Eres un cerdo esclavo," afirmo, "Ese es tu verdadero yo." Desde luego que tenía razón. Siempre me había gustado servir a los demás, en mi vida personal y profesional y me encantaba el sentimiento de ver la felicidad de los demás como resultado de mi servicio. Era algo natural para mí, y una prolongación de lo que ya hacía. La respuesta había estado ahí desde el principio. Soy una auténtica alma de esclavo, y a partir de entonces no hubo marcha atrás. Había cruzado el umbral.
Tan pronto como me di cuenta seguí hacia adelante con más ganas. Quería aprenderlo todo lo que significa ser un esclavo, en vez de solo sumiso. He leído mucho. Hay diferencias claras, que me reservo para otra ocasión. Pero mi Amo lo describió como "una auténtica alma de esclavo – la total necesidad y voluntad de reconocer una sumisión profunda a un hombre que siempre tratara y considerara como su superior." Mi Amo me había guiado pacientemente hacia la verdad. Durante el proceso, había hecho un viaje mental difícil hasta aceptar esta parte de mi alma. Hice una declaración de fe y me registré oficialmente como propiedad y con el collar de mi Amo. Pero al hacer esto, atravesé varias pruebas y obstáculos, y como nuestro héroe Luke, tuve que aprender nuevas reglas. Tenía ganas de mostrarle a mi Amo que reunía en mí la fuerza para dar la talla ante este desafío, y continúe con esa mentalidad. La esclavitud no se trata de ser débil y un pelele. Se trata de tener la habilidad de mantenerte al nivel de los más altos estándares y desafíos. Esto quería decir que tenía que llegar a una sesión lleno de energía, centrado, preparado e inmaculado. Empecé a hacer yoga y meditación para acostumbrarme a mantener la concentración durante largos periodos de tiempo y empecé a hablar con otros sumisos sobre sus experiencias y me dieron algunos consejos. Mi Amo me puso un cinturón de castidad para asegurarse de que me centraba en satisfacer sus necesidades. Había decidido no defraudar a mi Amo con un estándar más bajo de lo que él esperaba.
Mi Amo está orgulloso de respetar los protocolos debidos y me ha enseñado a incorporarlos en el servicio que le doy. Sé claramente lo que se espera de mí. Saludo formalmente a mi Amo besándole las botas, no cuestiono su autoridad, y siempre me dirijo a él como Señor. En público, soy muy consciente de que mis acciones reflejan quién es él, por lo que me aseguro de que la forma en que me comporto le haga sentirse orgulloso. En medio de todo este proceso hay consentimiento, confianza y una excelente comunicación. Fuera del servicio formal somos amigos, y hablamos de todo tipo de intereses, entre los que se incluyen las dinámicas Amo/esclavo, asegurándonos de que el otro es feliz. Me encantan nuestras conversaciones, y me ayudan a saber que me permito lanzarme totalmente a servirle, confiando en que mi Amo me conducirá de la forma que decida.
Si volvemos a Hollywood, y hacia el final de una película buena siempre hay una experiencia terrible, se dice que los héroes deben morir para poder renacer. ¿Saldrá con vida Luke? He salido victorioso de mi propio viaje mental, me he enfrentado al miedo, y he resurgido con más confianza en mí mismo, fuerte y sin sentimientos de culpa. He averiguado dónde encajo en la comunidad fetichista y ahora llevo yo la ropa fetichista, ya no me lleva a mí. ¿Cuál es la recompensa? No, no es un sable de luz, sino un tatuaje grande que me recuerda que no debo tener miedo.
Por eso, mi consejo es – sal ahí fuera y deja la webcam, sé claro, y destruye tu propia Estrella de la Muerte. ¡Que la fuerza te acompañe!
PD. La palabra ''héroe'' es de origen griego, procede una raíz que significa "proteger y servir." Un héroe es alguien que quiere sacrificar sus propias necesidades en nombre de los demás. Muy acertado en este caso.
Si quieres compartir tus experiencias fetichistas, con tu nombre o de forma anónima, envíanos tus ideas o un borrador a: social@recon.com
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